Juicio de Sean Combs: Kid Cudi revela atentado vinculado al productor
Durante el juicio contra Sean “Diddy” Combs, Kid Cudi testificó que su auto de lujo fue incendiado con un cóctel molotov, señalando un posible ataque del productor
- 22 de mayo de 2025 a las 14:10

Scott Mescudi, conocido como Kid Cudi, fue llamado a testificar durante el proceso judicial que enfrenta Sean “Diddy” Combs por cargos de tráfico sexual y crimen organizado. Su participación aportó un elemento de violencia colateral a la ya delicada trama legal del rapero. A continuación, los detalles.

El artista narró ante el jurado cómo, en enero de 2012, recibió una llamada de su cuidadora de perros alertándole sobre un incendio. “Me dijo que mi coche estaba en llamas,” declaró, según citaron diversos medios estadounidenses.

En ese momento, se dirigía a casa cuando un amigo le envió una fotografía que confirmaba el siniestro: el techo de su Porsche convertible había sido cortado, y los asientos interiores —de un rojo característico— lucían totalmente derretidos.

“La parte superior de mi Porsche estaba cortada y fue ahí donde insertaron el cóctel molotov”, explicó ante el tribunal, añadiendo que el daño al vehículo era total.

Las imágenes exhibidas en la sala dejaban en evidencia el metal retorcido, interiores del automóvil calcinados y algunos restos de la botella incendiaria.

El incidente, según se ha argumentado en la corte, podría estar relacionado con los celos que Combs habría manifestado en 2011, cuando Mescudi mantenía una relación con Casandra “Cassie” Ventura.

La propia Ventura —expareja intermitente de Combs— había declarado previamente que el productor le advirtió que si no cortaba todo contacto con Mescudi, haría explotar su coche.

Aunque Kid Cudi no señaló directamente a Combs como responsable del atentado, la cronología y contexto presentados tiñen de sospecha el entorno del acusado.

Este fragmento testimonial añade una capa más al complejo entramado del juicio, que ha atraído atención tanto por sus implicaciones penales como por las figuras públicas implicadas.

Mientras la defensa de Combs sostiene su inocencia, los relatos de testigos como Ventura y Cudi refuerzan la imagen de un entorno permeado por amenazas, violencia y poder.