Tegucigalpa, Honduras.- Solo en una lata de leche, un paquete de pañales y otro de toallas húmedas se invierten alrededor de 1,500 lempiras mensuales, eso buscando las opciones más cómodas del mercado. Mantener un bebé en la actualidad no es una tarea sencilla, mucho menos para aquellas mujeres que son madres solteras.
Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), hasta el cierre de 2024 –último año en el que se realizó la encuesta– habían 368,460 madres solteras en el Distrito Central, una cifra bastante alta, considerando que la población actual de la capital de la República es de aproximadamente 1,326,460 habitantes (hombres y mujeres).
Una gran parte de las mujeres que residen en Tegucigalpa y Comayagüela son madres que no tienen el respaldo de su pareja o simplemente el padre del bebé. Todas estas mujeres, día a día luchan por costear cada uno de los gastos que implica sostener un hijo en la sociedad actual.
Los gastos no se terminan cuando un bebé comienza a crecer, por el contrario, entre más crecimiento hay, mayores son los gastos: pago de escuelas, vestimenta, calzado, alimentación, cuidados de la salud, entre otros.
Para Hilda Caldera, socióloga de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), esta problemática radica en la falta de educación que hay para el sector masculino en la capital de la República y en el país.
“Al hombre se le enseña a jugar con carros, con objetos de guerra, la aventura, el espacio, a construir, pero nunca se le dice que va a jugar con muñecas, que es su casita, que va a cuidar, que tiene que ver por otros. Entonces el hombre no cuida ni se cuida, por eso la paternidad no es un valor para el hombre”, lamentó Caldera.
Esta falta de educación sexual y familiar en los ciudadanos, termina golpeando los núcleos familiares, dejando hogares desintegrados y, en la mayoría de casos, madres sin ningún respaldo económico y emocional.
Promedio de hijos
Según los registros y monitoreos anuales realizados por el INE, este 2025 la tasa de fecundidad en Francisco Morazán ronda 2.16 hijos por mujer.
Este promedio ha ido disminuyendo con el paso de los años, para 2020, por ejemplo, era de 2.22 hijos, pero tres años después —2021, 2022 y 2023— decayó hasta 2.18. La cifra más baja es la de 2025, ya que bajó dos centésimas hasta quedar en 2.16 hijos por madre.
Según los análisis de la Encuesta Nacional de Demografía y Salud, el promedio de hijos es mayor en las zonas rurales, que en las urbanas como el Distrito Central. Muchas de estas madres que manejan este promedio de hijos, trabajan en conjunto con sus parejas para mantener la familia.
Sin embargo, también existe una contraparte: las madres de dos hijos, que no cuentan con el apoyo del padre de los niños.
Por esta razón, Caldera cree que es importante que el Estado comience a adoptar sanciones contra quienes no quieran asumir su paternidad. “La mala masculinidad no se sanciona como se debería, porque todo niño debería tener un papá y una mamá, eso debería ser lo primero, que cada niño venga con un papá comprobado y una mamá”, aseguró.
Situación económica
La situación para estas madres se complica aún más cuando no es solo un hijo el que tienen que mantener, sino dos o incluso hasta tres, ya que los gastos y atenciones se multiplican.
Para Lara Bohorquez, parte del equipo del Centro de Derechos de Mujeres (CDM), tener un hijo, tiene costos altísimos, “actualmente vivimos en una situación mundial que los costos de vida son mayores que en la antigüedad. Por ejemplo, antes por lo menos uno podía tener un medio de vida, ya sea agrícola, un sustento de vida de verdad, como vinculado a la tierra, no necesariamente teníamos que estar en los espacios laborales o en trabajos remunerados”.
Además, lamentó que “son, generalmente, trabajos mal pagados. Además de que la canasta básica y todo lo que accedemos es mayor, está a precios altísimos”.
Según los registros del INE desde el 2021 hasta el 2024, los trabajos en los que más se emplean las mujeres son en diferentes tipos de servicios, vendiendo en centros comerciales y mercados. Empleos en los que, probablemente, el salario sea inferior al mínimo.
El salario mínimo en Honduras actualmente es de 13,985.16 lempiras mensuales, una cifra que apenas o definitivamente no alcanza para sostener dos o tres personas.
Para Caldera, esta situación debe regularse, centros escolares, universitarios, y, todavía más importante en los núcleos familiares se debe comenzar a cambiar la educación de los hombres e inculcarles la paternidad como un valor.